Cuento del osito tito

En un hermoso bosque, vivía un pequeño osito llamado Tito. Tito era diferente de los demás ositos, ya que tenía un pelaje de color blanco brillante que brillaba como la nieve. Aunque todos en el bosque lo amaban, Tito se sentía un poco triste porque no se parecía a los demás ositos.

Un día, mientras exploraba el bosque, Tito conoció a un búho sabio llamado Sabi. Sabi notó la tristeza en los ojos de Tito y le preguntó qué le pasaba. Con un suspiro, Tito compartió sus pensamientos con Sabi.

El búho sonrió y le dijo a Tito que su pelaje blanco era especial y único, al igual que él. Sabi le recordó a Tito que la verdadera belleza provenía de ser uno mismo. Animado por las palabras del búho, Tito decidió abrazar su singularidad.

Desde ese día, Tito comenzó a hacer cosas que lo hacían feliz. Descubrió que le encantaba bailar bajo la luz de la luna y contar historias a sus amigos. Pronto, los demás animales del bosque se dieron cuenta de lo maravilloso que era Tito cuando era auténtico.

El bosque se llenó de risas y alegría gracias a Tito, el osito único. Y así, Tito aprendió que ser diferente era algo hermoso, y que la verdadera magia estaba en ser uno mismo. Y así, Tito y sus amigos vivieron felices para siempre en el bosque mágico.