La otitis media es una inflamación del oído medio que ocurre con frecuencia en los niños. El oído medio es la cavidad que contiene los pequeños huesos del oído (martillo, yunque e estribo) y que se encuentra entre el tímpano y el oído interno.

Tipos de otitis media

Existen diferentes tipos de otitis media dependiendo de su naturaleza y duración:

Otitis media aguda

Es la forma más común de otitis media y se caracteriza por un inicio súbito de dolor de oído, fiebre y enrojecimiento e inflamación del tímpano. Suele curarse espontáneamente en una o dos semanas.

Otitis media crónica

Es aquella que dura más de 3 meses o se repite en 3 o más ocasiones en 6 meses. Provoca secreción purulenta detrás del tímpano y puede causar una acumulación de líquido (efusión).

Causas

Las causas de Otitis media más comunes son:

  • Infecciones respiratorias altas como resfriados, gripe, etc. Pueden propagarse al oído a través de la trompita de Eustaquio.

  • Alergias estacionales o perennes.

  • Cambios de temperatura y humedad.

  • Tabaquismo pasivo en menores.

  • Defectos estructurales del oído como estrechez de la trompita.

  • Sistema inmunitario debilitado.

Síntomas

Los síntomas de Otitis media en niños más frecuentes son:

  • Dolor de oído que empeora al tragar, mascar o masticar.

  • Fiebre.

  • Irritabilidad e insomnio en los niños.

  • Pérdida de apetito.

  • Pérdida de audición temporal.

  • Enrojecimiento y abultamiento del tímpano.

Tratamiento de la otitis media

El tratamiento dependerá del tipo y gravedad de la otitis:

  • Otitis media aguda leve: analgésicos y antibióticos tópicos.

  • Otitis media aguda grave: antibióticos por vía oral como amoxicilina (Consultar con su doctor antes de ser suministrado al niño).

  • Otitis media crónica: antibióticos orales durante más tiempo, a veces con timpanocentesis o cirugía.

  • Prevención: lavado nasal con suero fisiológico, vacunas, evitar el humo.

Es importante un seguimiento médico para controlar la evolución y prevenir secuelas como pérdida auditiva. Con un diagnóstico y tratamiento adecuados, la otitis media suele curarse sin dejar secuelas.

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